tendré que empezar a hacer ciertas concesiones a fin de no extinguirme. tal vez aún no es tiempo de emprender la vida que persigo. ni siquiera sé si la vida que deseo siente lo mismo por mi.
hay gente que dice "olvida el futuro, ese todavía no existe". ¿cómo olvidar algo que aún no sucede?
podría dedicarme a vivir instantes, momentos kodak, polaroids efímeras, tener siempre en la cabeza la idea de que lo importante es ahora. el futuro...
pero creo que sería mejor, al menos por ahora, sacrificarme un poco para descansar cuando deberas lo necesite...
nadja interrumpe mi divagación y me pregunta que qué escribo. ¿escribir? casi me aviento un clavado en la servilleta donde garabateo.
no sé qué responderle.
la red de mis pensamientos se desteje...
alguien en la peterpiperpizza habla por un micrófono. un güey está bailando en el pump. la televisión encendida adquiere volumen. poco a poco voy dejando atrás el lugar privado y hasta mi escritura se vuelve acelerada, incomprensible, tinta desesperada sobre una servilleta. nadja termina su pizza y me mira con esos ojos que dicen mucho, quiere que le ponga más atención. quiere que la acompañe de nuevo a los juegos. está lista. así es como emerjo a la superficie. todavía hay monedas en el bolsillo, el juego aún no termina.
amo a mi hija y aunque me apura y no puedo terminar de escribir esto, sé que me encanta pasar estos momentos en la pizzeria. ojalá y no se vuelva vegetariana cuando crezca.
hay gente que dice "olvida el futuro, ese todavía no existe". ¿cómo olvidar algo que aún no sucede?
podría dedicarme a vivir instantes, momentos kodak, polaroids efímeras, tener siempre en la cabeza la idea de que lo importante es ahora. el futuro...
pero creo que sería mejor, al menos por ahora, sacrificarme un poco para descansar cuando deberas lo necesite...
nadja interrumpe mi divagación y me pregunta que qué escribo. ¿escribir? casi me aviento un clavado en la servilleta donde garabateo.
no sé qué responderle.
la red de mis pensamientos se desteje...
alguien en la peterpiperpizza habla por un micrófono. un güey está bailando en el pump. la televisión encendida adquiere volumen. poco a poco voy dejando atrás el lugar privado y hasta mi escritura se vuelve acelerada, incomprensible, tinta desesperada sobre una servilleta. nadja termina su pizza y me mira con esos ojos que dicen mucho, quiere que le ponga más atención. quiere que la acompañe de nuevo a los juegos. está lista. así es como emerjo a la superficie. todavía hay monedas en el bolsillo, el juego aún no termina.
amo a mi hija y aunque me apura y no puedo terminar de escribir esto, sé que me encanta pasar estos momentos en la pizzeria. ojalá y no se vuelva vegetariana cuando crezca.
0 Comments:
Publicar un comentario
<< Home